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30 de marzo de 2009

Vamos a Ver

Hoy que escribo lo hago sabiendo que iré al hospital. Al parecer tengo una recaída de la enfermedad, y debo ir a ver qué pasa. Mi brazo derecho ha comenzado a dolerme mucho y me cuesta usarlo. Es probable que pierda su uso, y esto sería lo último que escriba. También podría ser que me recupere en parte y, aunque siga sin poder caminar, vuelva a usar mi brazo y pueda seguir escribiendo pronto.

En fin, deséenme suerte y espero regresar.

28 de marzo de 2009

Fanatismo

Sigo en mi búsqueda del sentido de la religión o las religiones, y el por qué es que algo que proclama el amor, la igualdad, el respeto y cosas por el estilo, es el motivo de tanto sufrimiento y guerras y problemas entre los seres humanos. Hoy se me ocurrió algo.

Sucede que básicamente una religión es una opinión. Es una visión del mundo, de cómo funciona y un intento de explicación de aquellas cosas a las cuales no les hemos encontrado explicación alguna todavía. Pero me doy cuenta de que el problema en sí es que las personas ASUMEN que esa "teoría", por llamarle de algún modo, es una VERDAD. Y no sólo una verdad, sino un verdad ABSOLUTA. Entonces resulta que lo que debería ser simplemente un "modo de ver las cosas" se convierte para la persona que lo cree en algo que no puede no ser cierto.


El problema de la religión sigue siendo que hay quienes creen que son dueños de la verdad, y que aquellos que piensan distinto están mal, o son malos, y que debe de introducírseles a la "Verdadera Verdad" para que no sufran las consecuencias. Entonces, el problema del fanático es que no se da cuenta de que una religión es una opinión, y no una verdad, por lo que actúa consecuentemente con eso. Y "aquellos que no conocen la verdad, deben conocerla y aceptarla, o morir". Esto es a grandes rasgos lo que hace de la relilgión un cerco de división y no un puente de unión entre los seres humanos.

Pero, ¿por qué es tan difícil para las personas darse cuenta de que la religión es sólo un modo de ver la realidad? Porque la religión alude a las preguntas más importante que el ser humano se hace: ¿de dónde viene el mundo? ¿de dónde venimos nosotros? ¿cuál es el sentido de la vida y la muerte? Nuestra necesidad de responder a estas preguntas nos causa tal ansiedad que no podemos aceptar que haya más de una respuesta, o que la verdadera respuesta no se conozca todavía. Pareciera que TENEMOS que ser dueños de la respuesta. DEBEMOS tener la razón. ¿Dónde quedaríamos si la verdad en que creemos, no es verdad?

25 de marzo de 2009

De Noche Para Siempre (II)

Luis Fernando Hernández. Sólo un apellido. Hijo único, nacido el 25 de enero de 1980 aproximadamente a las 10:57 de la mañana. Una persona me dijo una vez, que nacemos a la hora en que nos "hacen". Haber sido hecho casi a las once de la mañana no me suena ni formal ni romántico. Cuando me casé a los 19 años, mi mamá me hizo saber que mi papá quiso que ella me abortara. A los 24 por fin quise saber de él, mi mamá me dio un nombre y dijo en qué me parezco físicamente a él. Creo que no necesito más. Sólo un apellido.

Mi familia era pequeña. Nada más mi Buela (mi abuela), mi mamá y mi tío. De mi abuela, Leonarda, no tenemos mucha información. Sólo sé que es huérfana, de Quetzaltenango, no hay más información de su familia. Ella no se casó pero tuvo una hija: María del Rosario. Luego tampoco se casó y tuvo un hijo: José Armando. No puedo decir exactamente cómo, ella terminó haciendo trabajos domésticos para un ingeniero y su esposa. Vivía en la casa del ingeniero, y luego sus hijos también. Mi mamá tampoco se casó y tuvo un hijo, que también vivió en la misma casa. Los cuatro, familia pequeña que pudo ser mucho más grande, compartiendo un cuarto durante 19 años.

No puedo decir que mi niñez haya sido triste o alegre. Creo que la vida de cada quién está equilibrada, salvo algunas excepciones. Quizá, como escribió Sábato, lo que sucede es que tendemos a recordar nada más las cosas buenas. O algunos, las cosas malas. No puedo decir que hubiera sido mejor tener un padre y hermanos, no tengo un verdadero punto de comparación. Lo que sí puedo decir es que vivir con alguien con quien puedes ser tú mismo sin culpa ni temor a la censura es mejor.

Nací pues, como todos, en una familia que no escogí, y los amaría incondicionalmente. Y luego crecería para tener una visión crítica y una opinión propia de la personalidad y la vida de cada uno de ellos. Nacer humano es complicado.

23 de marzo de 2009

De Noche Para Siempre (I)

Para quienes aún no lo saben, padezco de Esclerosis Múltiple. La enfermedad me tiene parapléjico, estoy en silla de ruedas. Es probable que dentro de un tiempo vuelva a caminar, o puede ser que quede cuadrapléjico, no se sabe. Quizá me quede un mes de vida, o un año, u otros 29, es la naturaleza de la enfermedad. Así que decidí que sería bueno escribir una autobiografía.

El otro día lo pensaba duramente, y sé que no soy ningún héroe ni un ejemplo para lo demás. Quisiera serlo, al menos para mis hijas y algunas de las personas que más amo en el mundo. A veces, cuando estás enfermo como yo y no estás seguro de qué pasará con tu vida, terminas deseando que lo que te sucede tenga sentido, cualquier sentido. Lo he pensado, y me gustaría mucho que alguna de mis experiencias sirvieran de algo. Aunque sea pequeño, pero que algo de mi vida sea relevante para alguien en alguna parte del mundo, en alguna parte de la Historia.

Como he dicho, puede ser que viva unos 20 ó 30 años más, y que no sólo escriba mi autobiografía sino mucho más, e incluso camine de nuevo y todo esto haya sido sólo una experiencia más en mi vida. Lo que preocupa es no saber, no tener certeza. En realidad, si nos ponemos a pensar en serio nos damos cuenta de que en la vida de nadie existe la certeza, pero padecer una enfermedad discapacitante te hace estar más consciente de nuestras limitaciones como seres humanos en todos los sentidos.

Les pido de todo corazón sus comentarios futuros, sería realmente especial para mí saber que he hecho algo bueno por la vida de alguien. Gracias.

19 de marzo de 2009

No es en Serio

Parece un rasgo de la cultura guatemalteca, una de esas pequeñas grandes cosas que nos hacen "estar como estamos" y no mejor. Es como si no pudiéramos tomarnos muchas cosas lo suficientemente en serio.

El otro día veía en la televisión acerca de una huelga o algo así, ya saben que ciertos detalles que son cruciales para algunos, no son nada para mí. Recuerdo cómo la cámara enfocaba, y se veía a varias personas gritando y apoyando la huelga, pero luego se veía a un tipo callado y con una sonrisa en el rostro, el típico gesto de "estoy acá sólo haciéndole compañía a los demás". El gesto de vergüenza, de estar pero no querer estar, de hacer presencia nada más como un favor, sin participar de verdad, sin sentir nada.

Estar por estar, es algo clásico para los guatemaltecos. No sé si será algo general para otras culturas, para los latinoamericanos, o sólo para los chapines, pero parece que pocas cosas nos las tomamos en serio. Los estudios, las relaciones de pareja, el matrimonio, la salud, el trabajo, etc. Personalmente he visto a muchos que llegan hasta la Universidad sin saber exactamente qué quieren estudiar y por qué lo quieren, sin vocación ni motivación alguna para lo que hacen. Personas que se casan y luego no su matrimonio es un castigo, una cárcel, un juego, algo que está por obligación, como si lo hicieran por compromiso. Personas que llegan tarde a su trabajo, se quieren ir temprano, trabajan sólo en lo estrictamente necesario y muchas veces hasta tratan de convencer a otros que lo mejor es portarse igual. Yo mismo he cometido esos errores.

A la vez, estas personas se quejan de que las cosas no son ideales, su matrimonio no funciona, su relación no va bien, no sacan las mejores notas, no avanzan en su trabajo... ¿En qué clase de sociedad vivimos donde seguimos esperando obtener lo mejor dando lo peor de nosotros?

10 de marzo de 2009

Cerca del Suelo

En mis sueños muchas veces estoy huyendo.

Corro desesperadamente, corro tan rápido que despego los pies del suelo.
Algunas veces he robado algo, otras veces hice algo malo;
otras veces simplemente huyo, me persiguen.
Los escenarios son las calles, la montaña, un bosque, lo alto de un edificio.
Incluso en ocasiones me veo obligado a saltar del edificio, pero no caigo,
simplemente sigo huyendo, corro hasta que vuelo.

Sin embargo, siempre estoy cerca del suelo,
siempre estoy corriendo,
no me alejo de mi realidad por muy rápido que huya.
Una sensación de euforia, de miedo, de vértigo me invaden
mas no me consumen.

¿Huyo de mí mismo? ¿Huyo de mis miedos?
No lo sé.
Quizá estoy huyendo en busca de tus brazos,
y tus labios y tu corazón sean el final de mi travesía
y pueda por fin descansar.


a Claudia

8 de marzo de 2009

Es Humillante

Observo y aprendo y me indigno en ocasiones. ¿Qué hace que las personas consideren graciosa la humillación? ¿A qué responde esto? Veo la televisión gringa, más que todo, y la mayoría de las situaciones "graciosas" en los diferentes programas son creadas sobre la base de la humillación. Pareciera que humillar a otros da un signo de estatus, que una persona se hace valer más socialmente humillando a los demás. Muchos programas acerca de la vida de los adolescentes muestran cómo se lucha por evitar o causar la humillación. Y los más humillados son los menos exitosos socialmente, y los que humillan están "arriba".

¿Eso qué significa? ¿Qué debe significar?

En otros programas más bien se trata de personas que se humillan a sí mismas, que se meten en situaciones humillantes y aceptan esa humillación, digamos, "lo mejor posible". Eso también se hace con el fin de producir risa. Quizá, es un poco más digno aceptar la humillación que uno mismo se impuso, que la que los demás te imponen. Pero el principio es el mismo. La humillación da risa.

¿Por qué?

¿Cuál es la base de esto o con qué tiene que ver? Quizá tiene que ver con el poder que ejerce uno sobre otro. Quizá con que "yo" me siento mejor cuando hago valer menos a los demás. Entonces, me siento menos que los demás, y necesito hacerles ver como menos que yo para sentirme y verme mejor de lo que en realidad soy. Eso es más bien patético, y creo que también risible. Quizá esa sea la intríngulis: el que humilla más bien se siente humillado. Cosa apropiada para la comedia, pero no para un rasgo cultural.

Cosas de la construcción de una sociedad mejor, opino yo.

6 de marzo de 2009

No Necesito Casarme

Este post es bastante personal, pues conozco a alguien que, siempre que encuentra pareja simplemente se va a vivir con esa persona y dice estar casada. Me molesta en varios niveles, y díganme anticuado y hasta retrógrada, pero creo que he comprendido mejor ahora, por qué las personas que se sienten "modernas" por el hecho de no casarse, en realidad están ignorando bastantes factores que deben tomarse en cuenta.

Las sociedades humanas han sobrevivido a través de los años gracias a ciertos convencionalismos, a varias instituciones como el matrimonio. Es cierto que los tiempos cambian y que las instituciones deben de transformarse de acuerdo a las necesidades de los tiempos. Pero es diferente luchar por la tranformación de una institución a ignorarla o destruirla. Existen ciertas cosas que no se pueden ignorar, por el bien de todos, por el avance de la Humanidad. Creo que todos, por egoístas que seamos, a la larga debemos de contribuir aunque sea un mínimo al beneficio de nuestra especie. Cosa que me parece muy olvidada en estos tiempos en que cada quien siente que tiene derecho a hacer lo que quiera, como si olvidáramos las consecuencias.

Quien huye del matrimonio huye del compromiso. Es aquella persona que se una a otro con el pensamiento "si no funciona siempre me puedo salir sin problemas porque no estamos realmente comprometidos". ¿Es eso madurez? Creo que quien se casa, en primer lugar lo hace con veradera "fe", si se le quiere llamar así. Y en segundo lugar, lo hará con el pensamiento de "si no funciona debemos luchar para encontrar la forma en que funcione". Para aquél que se siente "moderno" por no creer en el matrimonio, más bien es alguien que ve la separación como primera opción, no como la última. Ve a su pareja como el celular de moda, la ropa o la computadora desechable que hoy me sirvió y luego mejor la cambio por otra. ¿Eso queremos en la sociedad actual? ¿Vivir en un mundo de matrimonios y familias desechables? Una familia y una sociedad sólida son cosas por las que vale la pena luchar.

3 de marzo de 2009

Odio a Primera Vista


Hace un tiempo hablé de la llamada experiencia del espejo. Nos ayuda a crear una imagen de nosotros mismos, puesto que cuando nos vemos en un espejo, nos vemos "como los demás nos ven, como creemos que los demás nos ven, como queremos que los demás nos vean". De tal modo que tenemos una idea bastante clara de lo que transmitimos a los demás, de lo que queremos transmitir con nuestra imagen.

Sin embargo, las relaciones humanas siempre serán imperfectas, y resulta que a veces no transmitimos lo que queremos con nuestra imagen, y la primera impresión que damos no es la "correcta". ¿No nos ha pasado? Quizá no nos importe tanto cuando malinterpretamos la primera impresión de otro, como cuando nos malinterpretan a nosotros al conocernos. Es amor a primera vista, pero a la inversa.

Pero no nos preocupemos, que el odio a primera vista se puede arreglar. Al igual que el amor a primera vista, aunque muchos románticos se decepcionen con la idea. A pesar de que la primera imagen que damos tiene mucha importancia, ésta se puede arreglar con nuestro posterior comportamiento, de modo que si dimos una "mala impresión", podemos lograr que no sea permanente. También nos ha pasado, "creí que era... pero resulta que...", "yo pensé que... y en realidad...", "siempre creí... y me demostró todo lo contrario..." Esto nos pasa para bien y para mal. Debo recalcar que no es lo más común, que las primeras impresiones en general son correctas, y que las malas interpretaciones tienen muchas veces que ver con motivos propios, y no tanto con que sea la otra persona la que proyecte una imagen errónea.

Lamentablemente, somos nosotros los que no sabemos ver.

1 de marzo de 2009

No es lo Mismo


No es la canción de Alejandro Sanz, y la única referencia que haré a ella la acabo de hacer. En realidad, pienso que todo es relativo, y que eso de ser pobre no puede ser tan malo, y ser rico no es tan bueno. Simplemente, depende del contexto.

Lo siento, no puedo concebir la idea de que todos seamos iguales. En ningún aspecto, y no logro comprender cómo mágicamente algún político o revolucionario (un político más violento) pueda arreglar los problemas de un país a través de medidas destinadas a que todos seamos iguales. No nacemos iguales. Algunos nacen más bellos, inteligentes, y serán más altos, rápidos, fuertes, morenos, blancos, varoniles, femeninos, etc. La naturaleza nos ofrece diferencias, y esa diferencias nos benefician a todos. Estoy de acuerdo con igualdad de derechos y oportunidades, tampoco estoy loco, pero las diferencias no se pueden ignorar ni evitar.

No puedo imaginarme en mi ignorancia o cerradez, un mundo sin pobres ni ricos, pero sí creo estar consciente de que, no es lo mismo ser pobre en Guatemala en África o en Finlandia, por ejemplo. Yo no creo que se trate de ser o no ser pobre, sino de la calidad de vida que se nos ofrece en cada país. Se trata de mejorar la condición de vida de cada país, de que ser pobre signifique tener carro propio, electrodomésticos, comida todos los días y demás. Es cierto, los ricos seguirán teniendo más, pero debemos luchar porque tener menos no sea tan malo.

¿Me doy a entender?