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20 de julio de 2010

Querer Tener la Razón

Somos unos niños, debemos aceptarlo. Es realmente difícil discutir como adultos (cuando ya somos adultos) y razonar adecuadamente para ganar una discusión. Si un niño no sabe discutir y cree que ganará "la razón" si grita más fuerte que el otro, si no es comprensible al menos es aceptable. Si en lugar de eso cree que ganará la discusión si inventa el insulto más ingenioso o grosero, hasta cierto punto no se le podría culpar. Incluso si cree que las discusiones se ganan con una buena combinación de ambas cosas. Lo deplorable y vergonzoso es que un adulto lo siga creyendo. Un adolescente podría utilizar su propio llanto y la manipulación para generar culpa en el otro y así ganar la discusión. El mecanismo es más complejo, pero no le llamaría correcto. Y es que, en una discusión acalorada, no nos importa tener la razón verdaderamente, sino simplemente que "nos den la razón".


Todos queremos tener la razón y la gran mayoría (no todos) creen tener la razón. Porque nos gusta creer que nuestra religión es la verdadera, nuestro equipo el mejor del mundo, nuestro partido político el que tiene las mejores ideas, nuestro peinado el que se ve mejor, nuestra manera de vestir la más correcta. Creemos que nuestro color favorito es el más bonito del mundo. Y nos cuesta aceptar que podría no ser así. Digamos que está bien tener ideas y opiniones firmes, pero negarse a la posibilidad de estar equivocados limita nuestra sabiduría como ninguna otra cosa. Y en una discusión no nos importa si nuestra opinión refleja una realidad, es suficiente con vencer al otro.


Inténtenlo, yo admito que he utilizado este recurso en alguna discusión. Simplemente, denle la razón al otro. No importa si están o no están de acuerdo. No importa si está proclamando que el cielo es de color verde limón. Denle la razón y estarán terminando la discusión. El otro se calmará y comenzará a escuchar. Será un poco más feliz y se abrirá a una verdadera charla. Incluso si después se le explica por qué no tiene razón, si se hace correctamente la persona se sentirá mejor después de haberle concedido la batalla. Humanos... tan simples a veces... Les agradecería que lo intentaran y verificaran que funciona, y que TENGO RAZÓN.


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