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4 de septiembre de 2009

Burla de la Burla

Existen muchos programas de televisión malos en Latinoamérica. Tantos programas de chistes que repasan todos los chistes que elaboró el programa anterior. Sólo cambian por un busto más grande, u bigote más falso, el nombre del presidente de turno, la muerte de Michael Jackson. Programas sin imaginación, sin ideas nuevas, sin sentido del humor real. Copia de lo que alguna vez supuestamente funcionó con las masas. Otros programas ni siquiera se toman la molestia de robar ideas, tienen menos voluntad de trabajar y consiguen videos de personas reales en situaciones "cómicas" reales. Uno se cae, al otro lo patea un burro, el de más allá no ve la puerta de cristal, y se desarma la mesa cuando todos están sentados frente a ella.

Todo "real", hasta que a alguien se le ocurrió que no necesitaban solaparlo y crearon los "Realities". Imaginemos primero situaciones reales pero incómodas y metamos gente normal ahí. Después imaginemos situaciones no tan corrientes y metamos gente normal ahí. Después metamos gente anormal, a ver qué pasa. Ahora hay que fisgonear en la vida de la gente poco común. Los artistas, los ricos, los enfermos, los pornógrafos... todos. Nadie se salva ni tiene vida privada.

Y los pobres televidentes de los "realities" ya no saben qué es la realidad. ¿Cómo me debo comportar ante tal situación? ¿Debo ser extravagante? ¿Eso es mejor? ¿Cómo mido la realidad de los ricos de Beverly Hills desde el televisor de mi casa en un asentamiento? ¿Debería empezar a comprar cosas en lugar de educarme? Muchos programas han sido una burla, y una buena burla. Pero los nuevos productores se han quedado sin espacio para las ideas por guardarlo para los billetes. Ahora lo que vemos es una burla de una burla. La ridiculización del ridículo, haciéndolo ver como algo habitual. Y las mentes que sólo saben decir "sí, así es" tendrán tatuada la palabra "reality" entre el hemisferio derecho e izquierdo. ¿Una pérdida? ¿Una lástima? Unos minutos más frente a la boca abierta de los telespectadores.

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